lunes, 4 de abril de 2011

Documento leído en el acto en Homenaje a David "Watu" Cilleruelo.


WATU


Hace 36 años que estamos pidiendo justicia por Watu, desde aquel 3 de abril de 1975 en que lo asesinaron, cuando Alberto Rodríguezfue a la seccional a denunciar el crimen, hasta el día de hoy.

Seguimos haciendo memoria: A David “Watu” Cilleruello, militante de la Federación Juvenil Comunista, lo mató Jorge Oscar Argibay, suboficial de la Armada y jefe de la custodia del entonces rector interventor Remus Tetu.

Tetu era un fascista que había huido de Rumania luego de la Segunda Guerra Mundial, y fue designado interventor de la Universidad Nacional del Sur y la Univerdad Nacional del Comahue en el ‘75, para desarrollar la conocida “misión Ivanessevich”, impulsada por el Ministerio de Educación de Isabel para “limpiar a las universidades de elementos subversivos”.

A Watu lo mataron a las 11 de la mañana del día en que había inscripción en las materias en la UNS, un día antes de asumir como secretario general de la Federación Universitaria del Sur. Fue el único estudiante asesinado dentro de una universidad nacional.

Y hacemos memoria en este nuevo 3 de abril con especial fuerza y convicción, será este mes y este año emblemáticos y cruciales para la historia de Bahía Blanca, ya que este 26 de abril empieza un nuevo y largo camino hacia la verdad y la justicia, comienzan los juicios a los represores y genocidas, los que debieron haber sido juzgados mucho antes y eso hubiera significado una verdadera justicia, pero bueno, hoy los juicios están a un paso, y esta fuerza, la de Watu, su Federación Juvenil Comunista junto a su partido, estarán como a lo largo de estos 36 años, junto a los familiares, los Organismos, Las Madres, Las Abuelas, y el conjunto del espacio popular que reconocemos diverso, haciendo memoria, pidiendo justicia, exigiendo cárcel común perpetua y efectiva para todos los asesinos.

Las expectativas que tenemos por los juicios, no nos impiden tener un intento de reflexión crítica.

En ese sentido el pedido de derogación de las leyes de punto final y obediencia debida, pese a los esfuerzos de la diputada por Izquierda Unida Patricia Walsh en los 90, nunca tuvo éxito porque los partidos radical y justicialista, no solo las reivindicaron sino que dieron un nuevo golpe con el indulto. Es positivo que hoy ante los jóvenes que se suman a la política con fervor y entusiasmo, (lo que saludamos desde nuestra fuerza), recordemos que los intentos del campo popular por juzgar a los genocidas tienen mucha historia.

Desde nuestra apreciación, no hay un acto único en la decisión de juzgamiento, ni se le puede otorgar el rédito en este caso al partido gobernante. La derogación de las leyes y la realización de los juicios, son la resultante de la larga e inclaudicable marcha militante de las madres, las abuelas, los organismos, los familiares, y también de los partidos de la cultura Marxista, cultura por la que Watu dio su vida, y seguramente por la que hoy daría sus mejores esfuerzos.

Decimos esto porque hoy hay un claro intento por desconocer que fueron los partidos de izquierda no exentos de errores y sectarismos, los que se plantaron contra el NO SE PUEDE, contra el fin de la historia que muchos compraron, los que en soledad durante muchos años acompañaron e hicieron propia la lucha de las madres, abuelas y organismos, llenando de reclamos cada 24 de Marzo, cada ronda de las madres, cada escrache de los hijos, y todas las expresiones como ésta de cada 3 de Abril, diciendo COMPAÑERO WATU: PRESENTE!!!!!!.

Una última reflexión nos merece el contexto de los juicios en nuestra ciudad.

Por una parte deseamos reconocer el enorme trabajo, la inquebrantable voluntad, la decisión y el coraje de los responsables de la anterior y de la actual Fiscalía, marcando felizmente que hay hombres que realmente defienden una justicia real, en contraposición lamentable con aquellos que solo la tienen para los poderosos.

Un hecho que no deja de llamarnos la atención y lo queremos socializar, es que justo cuando se acercan los juicios, el juzgado Federal vuelve a reflotar la causa que involucra a luchadores populares en el escrache que se le realizó al asesino Astiz en nuestra ciudad. No creemos que sea fruto de una casualidad. Es el intento para amedrentar a una parte del campo popular. Para estos compañeros, desde la FEDE toda nuestra solidaridad militante.

Asimismo, marcamos como un hecho absolutamente negativo, que el Presidente del Tribunal Oral se muestre con total impunidad junto a abogados que representan a los

genocidas y también junto al Dr.Sierra, es evidente que buscaba su recusación para dilatar los necesarios juicios.

Está claro que el Juez Velazquez no es garantía, que no se llega a estos juicios en las mejores condiciones, por lo tanto, rodear estas jornadas, generar múltiples y permanentes actividades, acompañar y contener a los testigos, será la garantía de que verdaderamente se logre justicia.

Es por esto mismo que seguimos reclamando a esta Universidad que asuma un compromiso profundo y definitivo con la democracia: que no permita que en sus aulas permanezcan los valores y agentes de esta dictadura que asedió a la institución y a todo el país; que deje de apañar a Montezanti; que no permita que Sierra, uno de los acusados por los crímenes de lesa humanidad, esté dando cátedra sobre Derecho Penal.

La UNS no debe ser protectora de asesinos, ni formadora de estudiantes pasivos y acríticos, ni productora de mano de obra barata para el polo petroquímico. Debe ser una institución formadora de militantes de la democracia

Estamos en una ciudad en la que el poder político en la persona del Intendente de la ciudad que responde al Gobierno Nacional, sigue manteniendo pese a las denuncias de los Organismos y de una parte del Concejo Deliberante, más un conjunto de Agrupaciones Políticas de la ciudad, al juez de faltas Germani, integrante en los años de la dictadura del Batallón 601. Nada extraño, de parte de un gobierno que dice que los chicos que delinquen son irrecuperables, que apoya la baja de la edad de imputabilidad, que tiene entre sus interlocutores más válidos a Damaso Larraburu y Vicente Massot. Sin duda, los bahienses no tendremos al intendente del lado de quienes exigimos memoria, verdad y justicia.

Compañeros: redoblemos los esfuerzos por acompañar este momento histórico, militando tal como lo hubieran hecho todos los cumpas que siempre reivindicamos.

Pedir justicia por Watu es pedir por los 30.000

Para Watu, los 30.000 desaparecidos, Jorge Julio López, todas las víctimas de este sistema capitalista:

Una vez más, nuestro mejor homenaje será la victoria.

COMPAÑERO WATU: PRESENTE!!!!!


Federación Juvenil Comunista

Bahía Blanca

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