martes, 6 de abril de 2010

Documento a 35 años del asesinato de Watu

Hace 35 años que estamos pidiendo justicia por Watu. Desde aquel 3 de abril de 1975 en que lo asesinaron, cuando Alberto Rodríguez fue a la seccional a denunciar el crimen, hasta el día de hoy en que pedimos que nuestra Universidad se presente como querellante en la causa nacional Triple A.


Seguimos haciendo memoria: A David “Watu” Cilleruello, militante de la Federación Juvenil Comunista, lo mató Jorge Oscar Argibay, suboficial de la Armada y jefe de la custodia del entonces rector interventor Remus Tetu, fascista confeso de origen rumano y autor intelectual del asesinato de David.


Tetu representó la mano ejecutora en la UNS de la conocida “misión Ivanissevich”, impulsada por el Ministerio de Educación de Isabel para “limpiar a las universidades de elementos subversivos” según el lenguaje que expresaban estos asesinos.

Esto fue una política sistemática que no solo se cobro la vida del Watu, sino la de 300 estudiantes universitarios entre el 74 y el 76 a lo ancho y largo de nuestro país.

Dicha acción disciplinante fue acompañada en nuestra universidad por la cesantía de 225 docentes, 200 no docentes y la expulsión de 23 estudiantes. Esta persecución inédita sobre la comunidad universitaria solo pudo ser posible con el sustento de una serie de sectores locales que tienen nombre y apellido: patotas de la CGT dirigida por Ponce, el empresariado local nucleado en la Corporación del Comercio y la Industria , un sector mayoritario de la iglesia católica, los servicios de inteligencia del ejército y la marina de guerra, y la consecuente línea editorial fascista de la Nueva Provincia , que tuvo como columnista con más de 1.200 artículos al rumano Tetu.


Esta universidad todavía tiene una deuda pendiente con la democracia, porque mantiene en sus cátedras a docentes como Montezanti, quien ofició como defensor de Argibay, del Capitán Adalberti, asesor e ideólogo de los sindicatos ortodoxos peronistas, militante desde su juventud en los sectores ultra nacionalistas del Comando Nacional Universitario (CNU), y hombre que sin duda para los comunistas formó parte de los autores materiales e intelectuales del asesinato de Watu.


Otro ejemplo de esta impunidad manifiesta es la permanencia como docente de Hugo Mario Sierra, quien fuera el defensor de Montezanti en el juicio por calumnias e injurias realizado contra el compañero Alberto Rodríguez , por denunciar públicamente su condición de miembro de la “Triple A”, el mismo era el acompañante del juez Madueño en sus visitas frecuentes al centro clandestino la escuelita.


La Universidad nacional del sur debe presentarse como querellante, no puede haber más dilaciones y se necesita la voluntad política del rector para llevar adelante lo resuelto por el consejo superior y la recomendación realizada por los abogados de la UNS.


El ejercicio de la memoria debe se acompañado con los hechos de nuestra historia actual. Debemos decidir qué modelo de Universidad queremos, lo que es decidir qué modelo queremos para nuestra ciudad:


Si queremos perseguir el fantasma de la inseguridad con cámaras en cada rincón y al mismo tiempo condecorar la impunidad dándole a Monseñor Mayer (Arzobispo que expulsó de la Iglesia a las madres de desaparecidos) una distinción por su trayectoria, como ejemplo del “Bahía es bicentenario”. Y en la universidad seguir cobijando representantes de la dictadura, y continuar formando profesionales para las empresas del Polo petroquímico, atendiendo a los intereses privados, que son los que configuran la privatización de nuestra cultura, nuestra educación y de una forma de hacer política y contaminado nuestro medio ambiente.


O queremos una Universidad verdaderamente pública y gratuita, que brinde respuestas a las necesidades e intereses de la mayoría de la población de nuestra ciudad y la región. Que sea parte integral de un proyecto donde se desarrollen las aspiraciones de la comunidad, la cultura, el comercio, la industria y la política. Una Bahía Blanca que defienda lo público sobre lo privado, y que desde lo público incentive el desarrollo y la democratización de las diferentes áreas de investigación, de la ciencia y de las artes. Una Bahía que construya, y que no olvide ni perdone.


Como generación de jóvenes militantes, tenemos una expectativa y un compromiso mayúsculo para que sea escrita con justicia la verdad histórica; la “triple A” no inauguró el comienzo de una guerra entre dos bandos opuestos, sino la aplicación de un plan sistemático de exterminio, en el marco del plan Cóndor que se llama concretamente genocidio.


Las responsabilidades de la desaparición de 30000 compañeros no recaen solo sobre militares sino también civiles, y las mismas deben ser investigadas y juzgadas. Somos continuadores de la lucha por los juicios que han desarrollado paciente, perseverante y autónomamente las fuerzas políticas y sociales que jamás han aceptado el “es lo que hay” ni han negociado con la sangre de los compañeros caídos.


Estamos convencidos de la imperiosa necesidad de la unidad respetando las diferencias a la hora de construir un proyecto político de carácter alternativo, autónomo, antiimperialista y antineoliberal, en sintonía con los procesos de transformación Latinoamericanos que encabezan Cuba, Venezuela, Bolivia y Ecuador.

Donde los jóvenes podamos reconstruir nuestra perspectiva de futuro desde el protagonismo en la construcción de los hechos políticos. No queremos ser fuerza de apoyo sino constructores centrales de un proyecto liberador.


La discusión en la Argentina no es la aparición de la derecha, siempre estuvo, en todo caso la discusión es como enfrentar a la derecha, si con opciones políticas que encierran en si mismo la derecha o con construcciones que generen una verdadera alternativa.


Cual es la diferencia entre un Neoliberal hijo de los 90 como Macri en materia de seguridad, persecución de los sectores mas desprotegidos, intentos de prohibición permanente a las manifestaciones populares, en fin, una política Fascista y la reforma del código contravencional propuesto por Scioli en la provincia de Buenos Aires, que plantea lisa y llanamente la judicialización a los sectores humildes y populares, y aplicar cosas tan fascistas como el “merodeo”.


Dos gobiernos, uno que es oposición de “derecha” y otro que es pilar en el acompañamiento del gobierno nacional: y una sola política, represión a los sectores populares y fundamentalmente juveniles que somos víctimas de la falta de futuro, de la desesperanza, de la droga, del gatillo fácil.


Uno de los valores esenciales que se rescatan de las luchas populares, es la memoria. Memoria para recordar a nuestros héroes; para hacer de sus ejemplos guías para el compromiso de continuar exigiendo justicia, para que los asesinos y responsables del terrible genocidio paguen sus culpas y sus nombres queden grabados en la historia del repudio popular. Sobre todo memoria del proyecto que un pueblo vio pospuesto a través del genocidio, pero que está en nosotros retomar.


Por Watu, los 30.000 desaparecidos, por el compañero Jorge Julio López desaparecido en democracia y la compañera Silvia Suppo recientemente asesinada siendo testigo de la “Causa Brussa”.


Por una universidad democrática y participativa.


Una vez más, nuestro mejor homenaje será la victoria.




COMPAÑERO WATU...PRESENTE!!!



Federacion Juvenil Comunista de Bahia Blanca

No hay comentarios: